El vibrador Stick de Iroha es el tipo de vibrador más discreto que puedes conseguir. Es difícil notar que se trata de un juguete sexual incluso desde cerca.
Teniendo en cuenta su tamaño compacto y su diseño discreto, viajar con este vibrador es tan fácil como hacerlo con el teléfono en el bolsillo.
Es difícil dañar la parte vibratoria del juguete gracias a la tapa protectora incluida que se acopla fácilmente al dispositivo.
Aunque no es recargable y necesita pilas para funcionar, puede seguir funcionando un par de horas con facilidad con una sola pila.
Es uno de los mejores juguetes sexuales que puedes conseguir si disfrutas exclusivamente de la estimulación externa del clítoris.
Incluso si no te gusta, Stick merece la pena, ya que es un vibrador de bala muy asequible.
Los niveles de ruido del Stick no son demasiado drásticos. Puede ser un poco agudo, pero sigue siendo silencioso y no supondrá un problema en la mayoría de los casos.
El vibrador Stick de Iroha es resistente al agua, lo que significa que se puede limpiar fácilmente y divertirse mucho con él en la bañera o en la ducha.

4 razones para no comprar

El hecho de que este juguete no sea recargable y que requiera una batería reemplazable para funcionar puede ser bastante molesto.
Si prefieres vibraciones rumbosas y profundas, entonces Stick de Iroha no es la elección más sabia.
Es casi imposible controlar el juguete con una sola mano. Dado que no hay botones, hay que girar la base para cambiar las velocidades de vibración.
No hay patrones de vibración ni pulsaciones con el Stick de Iroha.

Conclusión

Si buscas un juguete sexual discreto, éste es el tuyo. Iroha puede mezclarse perfectamente con el maquillaje de tu bolso y no mostrar nunca ningún signo de que es realmente un vibrador. Además de ser extremadamente discreto, este juguete es cómodo y dura un tiempo sorprendentemente largo. Puede que te resulte un poco molesto de controlar, ya que no tiene botones, pero en general es un juguete divertido y ridículamente barato.